miércoles, 4 de enero de 2012

LA BATALLA DE OTUMA

UNA DE HERNAN CORTES
LA BATALLA DE OTUMBA



De los héroes de la épica española, tiene para mí un especial atractivo Hernán Cortes. Cuando escuchamos a los liquidadores de la historia y la hispanidad, nos hacen imaginar potentes ejércitos europeos, con sus caballerías, artillerías, buena intendencia y cuerpos de ejércitos maniobrando frente a pequeñas tribus de indios desarrapados. Pues no señor, nada mas lejos de lo que ocurrió, lo cierto es que raras veces contaron los españoles para sus conquistas con mas de quinientos europeos a la vez, lo que si contaron fue, y no siempre, con ayuda de tribus indias, que estaban hasta los mismísimos  de los imperios indios dominantes y de sus manías de sacrificios humanos y esclavitud asegurada.

Veamos la increíble batalla que libro y gano Hernán Cortes en las llanuras de Otumba, esta batalla, lo diría cualquier analista militar era imposible de ganar, se enfrentaban 600 españoles (de ellos 200 eran indios txaltecas) contra cerca de 45.000 indios aztecas. El objetivo de los españoles era alcanzar las tierras amigas de los tzaltecas después de la tragedia de la noche triste, para reorganizarse y curar sus heridas. Para  infortunio de los españoles apenas tenían munición ni tampoco caballería y la tropa estaba agotada por los combates de Tenochticlan y las largas marchas hacia las tierras de lo txaltecas, aliados de España. Fueron los españoles rebasados y vieron interrumpido el camino de la salvación, pero Hernán Cortes no era hombre que contemplara el deshonor de la rendición (cosa por otro lado normal, ya que el destino de los prisioneros era siempre el sacrificio en las pirámides aztecas), por lo que se dispuso a morir en el campo de batalla, pero antes dejaría el pabellón de sus armas a la altura de un tercio español.
Dispuso sus menguadas fuerzas en un cuadro al estilo español, en el exterior las picas, en el centro las escasas armas de fuego que le quedaban y la escasísima caballería de que disponía, apenas una docena y las dagas como siempre alrededor de los piqueros.
Los aztecas se las prometían felices, tocaban a un español cada setenta y cinco indios, así que se dispusieron a hacer el mayor número de prisioneros. Sin prisas ni precauciones cercaron por completo a los españoles confiados por el escaso fuego que recibían del cuadro español, que como hemos dicho carecía prácticamente de munición.
De esta forma cometieron su primer error, se lanzaron contra el cuadro sin preparación de lanceros y flecheros lo que mantuvo el cuadro intacto y al llegar al contacto con el enemigo, funcionaron las picas a pleno rendimiento causando gran mortandad entre los atacantes.
El cacique jefe Cihuacóatl cometió entonces su segundo error, plenamente convencido de su superioridad se acerco a una elevación cercana del terreno para observar bien la batalla e infundir animo y temor a sus tropas, (es bien conocido que la lealtad del soldado azteca era mas debida al miedo a sus lideres que a un sentido del honor), nada importaban las bajas la superioridad de los aztecas era impresionante.
A Hernán Cortes la imprudente maniobra de su enemigo no le paso desapercibida y se dispuso a aprovecharla, llamo a sus capitanes y les planteo su plan. Cargarían los capitanes junto a Cortes para alcanzar y dar muerte al jefe enemigo, si lo conseguían el derrumbe y la estampida enemiga estaría asegurada.
Fueron estos Don Gonzalo de Sandoval, Pedro de Alvarado, Cristóbal de Olid, Alonso Dávila y Juan de Salamanca.
La operación era de alto riesgo entre ellos y el azteca había una nube de indios que les bloqueaban el paso, pero era necesario hacer algo y rápido las cargas aztecas empezaban a hacer mella en las agotadas fuerzas de los aguerridos españoles y sus aliados y la avalancha azteca no cesaba. Montaron los seis héroes en las caballerías que quedaban y al grito de Santiago u cierra España iniciaron la carga. Los indios no daban crédito a lo que veían sus ojos, de la maraña de lanzas, salían dando voces aquellos diablos a caballo con los ojos inyectados en sangre, espantados abrían hueco a la carga por lo que esta no tardo en llegar a Cihuacóatl, cuya guardia personal, presa del espanto huyo atropelladamente dejando desamparado a su líder, este no tardo en caer de su litera alcanzado por una certera lanzada de Hernán Cortes y al momento fue rematado por uno de sus capitanes. El resto de la historia os la podéis imaginar, la totalidad del ejercito azteca se dio a la fuga, siendo perseguidos por los españoles que causaron estragos en sus filas.
De esta forma consiguió Cortes salvar a sus tropas y poder planear, ya en las tierras amigas de los txaltecas la venganza por la noche triste y la caída de tenochticlan.

Los enemigos de España ocultan estos hechos heroicos que ellos nunca fueron capaces de realizar, pero lo que nos duele a nosotros, es el olvido que pretenden muchos malos españoles, no será desde este blog el que lo haga.

Hernán Cortes uno de los grandes  héroes de España


Manuel Maqueda





9 comentarios:

  1. Gracias por divulgar este hecho de armas que como bien dices solo era propio de españoles. Santiago Tremps

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  2. Te felicito por tu aporte. Aquí en América se lo conoce porque la epopeya de Hernán Cortés, significó la libertad para los indígenas de lo que hoy es México. Los aztecas eran unos tiranos, se dedicaban anualmente a asolar las otras tribus, matando a los primogénitos, robando niñas para hacerlas sus esclavas sexuales, y cobrando impuestos para vivir sin hacer nada.
    La princesa Malinche le consiguió a Cortés 2 ejércitos de 25.000 indios voluntarios a pelear contra los aztecas. Con el primer ejército perdió el primer intento de tomar Tenochticlan, pero con el segundo tuvo éxito.
    Gracias por revivirlo

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  3. En breve, publicare , algunas mentiras que circulan , por todo el mundo, sobre la colonizacion española. Ya es hora de que , sobre todo los hispano americanos, conozcamos nuestra historia real, paso previo, para formar una entidad supranacional hispana, formada por naciones libres que ademas son naciones hermanas.
    Un saludo

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  4. Aunque decir esto sea políticamente incorrecto, Hernán Cortés es el mayor héroe que tenemos los mexicanos, a quien sin embargo la historia oficial le ha negado el reconocimiento que se merece junto con los doce Franciscanos que él mandó traer para evangelizar y civilizar a los indios. Él es el verdadero fundador de la Patria mexicana, aunque esto le duela a la masonería, que da el título de Padre de la Patria a Miguel Hidalgo, quien en realidad inició la destrucción de la civilización mexicana forjada en trescientos años de virreinato, y abrió las puertas a la explotación extranjera.

    Roberto Hope

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  5. Que buena la historia contada desde el punto de vista Español y del mexicano, en el cual hablan de una liberación.
    Ahora? y el Oro y las riquezas que le pertenecerian al pueblo Mexicano en la actualidad.

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    1. Siempre el mismo recurrente argumento del oro. Mire vd. La inmensa mayoría del oro se quedo en América en manos de los terratenientes, que por supuesto jamás lo repartieron entre los indios, como tampoco lo hicieron los emperadores Mayas ni los supuestos libertadores posteriores a la independencia.
      El asunto del oro es parte de la leyenda negra, ni se exploto el oro en las cantidades supuestas, ni se agotaron las minas, ni nada parecido.
      Este argumento tan manido del oro es como si los españoles, se nos ocurriera la tontada de reclamar el oro a Italia, porque los romanos explotaron y agotaron las minas españolas de oro.
      ¿Acaso la riqueza de América es el oro?¿No será mas bien una pobre excusa para justificar lo mal que se han hecho las cosas desde la independencia?
      Mire vd. América posee una riqueza impresionante que nunca ha sido bien explotada y esa si es una riqueza capaz de levantar las economías sudamericanas y a los pueblos sudamericanos, pero claro es mas fácil vender las explotaciones a los yanquis y sentarse a llorar por el oro que se llevaron los españoles.

      Para que sepa vd. La mayor riqueza que se llevaron los españoles a Europa, no fue el maldito oro, empleado luego en mantener guerras religiosas, como le digo, la mayor riqueza fue la patata. Si como lo lee, ese tubérculo tan despreciable del que los indios apenas consumían, es sin embargo el que salvo de la muerte por inanición a Europa muchas veces.

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  6. Personas como ud Manule Maqueda son las que hacen falta hoy dia,para que despierte el patriotismo Hispano que tanto hace falta.
    Muy buen trabajo.Un fuerte abrazo. Un HISPANO Y ESPAÑOL.

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  7. Se escribe Tlaxcala y sus pobladores tlaxcaltecas.

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